martes, 12 de febrero de 2008

SABADO MOVIDO


Sábado al mediodía me fui a comprar ropa. La ocasión lo exigía, uno empieza a salir y obviamente hay que empilchar bien.
Luego de una siesta reparadora fui de Mauro, que me salió con que no iría. (Para mí un problema menos, pues el tema me tenía preocupado, no insistí, aunque el muchacho dejo abierta la posibilidad para la próxima...)
Sin cenar absolutamente nada partimos y nos encontramos en el pub con el resto de la banda, Ricardo y Edgardo habían llevado a Gonzalo. Tras hacer tiempo allí nos fuimos para Coyn Rouge.
Yo hice de presentador no oficial, recorrimos el hall, la pista superior, la barra, la pista inferior, los patios y las graderías, todos estaban muy sorprendidos por el lugar.
Había más gentes y más gente linda. Era la Noche de Bacanal con espectáculo con strippers y chicas, aceptable, donde cambiaron besos por tragos (lo cual fue original)
La banda se adaptó muy bien, se ve que les gustó, porque se quedaron hasta bien tarde.
Especialmente Gonzalo recorrió el lugar, aunque no siguió mis consejos de hablar, hay que hablar con la gente, eso no trae problemas y si hay onda... es la forma mejor de relacionarse, pero hay que darle tiempo.
Yo disfrutaba del baile y los tragos como siempre. Gustavo también (creo que realmente le esta gustando, o se viene dando cuenta que yo voy allí con EL, no a levantar a nadie...).
La banda se fue tipo cinco y media de la mañana y al rato, mientras salía a tomar aire y mirar a los bonitos ejemplares, pasan junto a mí Coqui y Tincho, dos viejos camaradas de la época de la gran juerga. No me saludaron. Gustavo detectó al toque la presencia.
-¿Por qué no vas y los saludás?- me dijo
- Porque ellos no me saludaron...- respondí.
- ¿Y vos te pensás que con esa facha ellos te podían reconocer? ¡Andá y saludalos!- fue la réplica con toda la lógica de Gustavo.
Obvio, yo de gorrita, ropa de marca, no estaba reconocible. Así que fui, no lo podían creer. Quedamos en mantenernos en contacto, Tincho se mantiene, Coqui está medio hecho bolsa.
Y Gustavo que en su cambio de idea ahora quiere que los invite. Quizá lo haga.
Al rato nomás nos fuimos. Yo volvía muy eréctil luego de una noche interesante, y ya comenzamos a chacotear en el auto, estaba hecho un tigre, así que ni bien llegamos se pueden imaginar como recibió Gustavo!!!!!!!!!

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