SEGUIMOS DE FIESTA!!!!!

Con motivo del cumpleaños de Gustavo invitamos a nuestros amigos Gays para el sábado a la noche.
Darío y Julián no podían por cuestiones de trabajo. Pero el resto sí.
Decidí no complicarme mucho.
Tenía medio lechón en el freezer, un cuarto delantero de chivo y compré un poco de carne de vaca, porque Gustavo es medio raro, no come casi de los otros bichos.
Así que los preparé a la parrilla, acompañados de ensaladas de lechuga, tomate, y la clásica rusa (papa zanahoria arvejas y mayonesa).
Teníamos buenos vinos del Valle del Río Negro, uno rosado excelente, cerveza y champagne para el brindis.
Vinieron Ricardo y Edgardo, Gonzalo y su amigo Carlo, Alejandro y Omar (otra pareja)mas nosotros dos.
Conversamos, miramos videos musicales, comimos de todo, mi torta helada para Gustavo casi se derrite pues este atiborró el freezer con bebidas y casi lo ahorco!!!!!
Terminamos con el último champagne a las 3 y media de la madrugada.
A las nueve me había levantado a lavar los platos. Pronto Gustavo se me sumó a secar y ordenar.
Nos sentamos a tomar unos mates mientras el calor veraniego comenzaba a hacerse sentir y llegaron los primeros parientes en una pick up.
El domingo era festejo con la familia con Barril de Cerveza Santa Fe.
Yo partí a buscar a mi vieja y a mi suegra.
En la primera partida las traje y luego me fui a buscar a los Diositos amigos de Jirey y del Tony, que es el sobrino de Gustavo y Jirey.
Hablando de esto: la pareja de Jirey, Alvaro, es la segunda vez que viene a casa.
Los amigos del Tony estaban muy lindos, yo se que es territorio prohibido, pero no podía evitar mirar.
Tomamos cerveza como si fuera agua, impulsados por el calor, compensando el mismo con permanentes visitas a la pileta. Por suerte tenía habilitada la otra piletita para los niños, así que estos no nos rompían la paciencia.
Luego de picar y tomar me fui a dormir.
Desperté para llevar de vuelta al primer grupo, pero se quedaron los diositos, hicimos unas papas y batatas fritas y huevos fritos, todo muy liviano, que bajamos con Sidra. Gustavo harto de Diositos se fue a dormir sin cenar y yo quedé allí conversando hasta que se hizo la hora de llevarlos.
¿Habrá sido esta la última fiesta?