jueves, 26 de marzo de 2009

DESPEDIDA


Mi amigo Mauro partió finalmente hoy rumbo a Italia.
Fueron cuatro años de una amistad sincera.
Compartimos los sueños y la misma corriente política, compartimos tiempo, confidencias, pesares.
El planteó que su camino era hetero, y tanto Gustavo como yo respetamos su opción.
Pero ello no fue un obstáculo, por el contrario.
Vinimos haciendo despedidas.
Pero ante la inminencia fuimos tomando conciencia.
Ni la crisis que sacude a Europa, ni las dificultades para quienes no son nativos de allá fueron argumentos para usar.
Solo el deseo de que salga adelante, que construya su historia, que se juegue.
Conocida esta chica de allá al menos va con algo en vista.
Así que hoy, luego de despedirme, y mientras miraba por el espejo retrovisor como se levantaba la tierra los ojos se me humedecían.
Dicen que partir es morir un poco, y en esta historia ambos morimos un poco.
Porque los sentimientos parecen no tener tanta fuerza hasta que la ausencia nos pone de frente al hecho de que estos eran mucho más profundos de lo que uno suponía.

5 comentarios:

/ dijo...

Cuánta razón tenés en la frase final. Además, la vida está hecha de presencias y no de ausencias. Pero bueno, en tu corazón va a estar siempre. Y además hay que agradecer que vivimos en esta época en que podemos estar comunicados al instante, cosa que no es menor.
Lo que me llamó la atención, siempre y cuando haya entendido bien, que un homo decida ser hetero, hasta ahora no lo había escuchado.

BESOS

Unknown dijo...

Hago uso de mi derecho a ser concreto. Ahhh las despedidas, recuerdo dos que me han partido el corazón, pero bueno, aún cuando todavía siguen doliendo, creo que ya al menos es un dolor llevadero.

Salu2

BRILLI-BRILLI dijo...

Que duras son las despedidas,espero que a tu amigo le vaya muy bien por estas tierras europeas.
Besos

BRILLI-BRILLI dijo...

Que duras son las despedidas,espero que a tu amigo le vaya muy bien por estas tierras europeas.
Besos

plstk dijo...

Despedirte de alguien es dejarle una parte de tu corazón, por eso luego duele tanto. Ánimo