RUTINA MOLESTA

Estas semanas, por una cosa u otra, no pudimos salir. Y fui cayendo en ese círculo vicioso del día tras día. No es que yo sea un genio de la creatividad, pero me gusta encarar cosas diferentes, nuevas actividades y salir. Eso me renueva. La rutina me agota y Gustavo no es muy innovador. El estar en actividad además lo pone en otra situación y elimina esos roces inevitables. Como si fuera poco vuelven las reuniones políticas y debo soportar su cara de ternero degollado, que realmente me saca de quicio. Porque por más que yo lo quiera es obvio que tengo y tendré mi vida, y no voy a renunciar a mis actividades para quedarme en casa cocinando.
La clave es que sospecha que mis actividades políticas son solo frenéticas orgías y el la víctima de mi crapulencia!
Por desgracia para mí el ambiente político es poco propicio para las actividades gays, además nunca mezclé las cosas, así que en tanto yo vaya a reuniones puede estar tranquilo, pero obvio no lo está.
La solución: salir, visitar amigos, ir a bailar, tener la cabeza en otra cosa. Y de paso planear el nuevo garage, porque al garage de casa lo voy a ocupar como escritorio con la nueva computadora!!!!!!!!